jueves, 31 de julio de 2008

La lotería de la muerte (que trata sobre carteles y accidentes de tráfico)

Se me ocurrió escribir esta entrada mientras conducía por la autopista y leía uno de esos carteles luminosos que ponen mensajes del estilo "coche averiado" o semejantes. Hace algún tiempo hicieron una prueba piloto con otro tipo de contenidos y la verdad es que caló, con lo que ahora están repitiendo. El mensaje consiste en indicar en varios idiomas el número de muertos y heridos graves por accidente de tráfico en Catalunya hasta el momento.

Por ejemplo, el lunes se leía: "En Catalunya, 175 muertos y 730 graves". El martes la cifra cambió a 178 muertos; el miércoles era de 179 y hoy, al venir, era de 183. Aunque es cierto que en verano aumenta el riesgo de accidentes porque también aumenta el número de desplazamientos, todavía nos quedan una operación retorno de julio, una operación salida de agosto, otra operación retorno de agosto, el puente del 11 se septiembre, el de todos los santos, la constitución y la purísima y por supuesto las navidades. Seguramente llegaremos a la cifra de un muerto al día, más o menos, y 5 heridos graves.

Eso significa que, a diario, lo mismo que toca el cupón de la ONCE hay una persona que muere en la carretera y 5 que quedan malheridas. O sea, una família rota por el dolor y por lo menos unas pocas con algo más que un gran susto. En ocasiones por despistes, por imprudencias o, en cambio, por estar en el lugar incorrecto en el momento equivocado. Todos los días, sin excepción, en Catalunya. Extrapolado a la totalidad de España, pues mucho peor.

Cada día que sales a la carretera, juegas a la ruleta. Todos los conocidos que uno tiene y que se dirigen al trabajo, al gimnasio, al club, de fiesta... todos juegan, sin saberlo, a esta lotería de la muerte. Una lotería que, muy al contrario que muchas otras, siempre toca.

miércoles, 30 de julio de 2008

Iconos de la adolescencia (que trata sobre aquellos lugares que fueron pero dejaron de existir)

Hoy me he enterado de una noticia terrible. Up & Down, la mítica discoteca adolescente, cierra definitivamente sus puertas. Atrás quedan 26 años de referente nocturno para la juventud al principio para pasar por la época adolescente después. La primera discoteca "seria" a la que fuimos muchos (la única que permitía a menores de 16), pasando poco después a Jimmiz, igual de pija - anda que no cantaba yo xD - pero de más nivel.

Nunca fuí mucho de discotecas aunque el baile lo domino a la perfección, no es por inmodestia decirlo, solamente iba por las niñas. Eran otros tiempos, la verdad.

Ver caer un emblema como U&D, el lugar mítico donde Gemma celebró su 18 cumpleaños (yo ya estaba allí :D ) es un síntoma más de que nos hacemos mayores.

Qué lástima, coño.

martes, 29 de julio de 2008

Día nublado, con sol a la luz de la luna (que trata sobre... cansancio, creo)

Estoy cansado. No triste ni enfadado, pero sí cansado. Tampoco exageradamente estresado, pero muestro síntomas de agotamiento mental. Incluso jugando a tenis me cuesta concentrarme cuando las cosas mínimamente se tuercen. Necesito dejar que mi mente descanse. Un poco, por lo menos.

Recuerdo que cuando iba al cole planteé un dibujo a mi profesora titulado con el nombre que pone en la entrada, seguramente inspirado en cualquier gilipollez de Mortadelo y Filemón o vete tú a saber. Pero en cualquier caso fue el único dibujo que aprobé - olé por Ibáñez, pues - y ya entonces reflejaba muy bien mi estado de ánimo del momento, aunque supongo que por razones distintas. Hoy me siento así especialmente, como un día nublado con sol y a la luz de la luna, pero todo junto.

Mientras algunos siguen desaparecidos en combate y otros haciendo las américas, la inspiración se mantiene local. Localmente fuerte e intensa, eso sí.

Porque... ¿cuando era que tenía vacaciones yo?

lunes, 28 de julio de 2008

En homenaje a Calderón (que trata sobre sueños, muy brevemente)

"¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño,
que toda la vida es sueño,
y los sueños sueños son."

Porque puede que a veces los sueños no provoquen somnolencia, que soñar te haga trasnochar y que las preguntas generen más preguntas en lugar de las esperadas respuestas.

Si Calderón se preguntaba si la vida era real o era en cambio producto de la imaginación, bien hay otra forma de encontrar la solución que no sea pellizcarse una mejilla ni utilizar razonamientos literarios. Pues es posible soñar un sueño pero no soñar en un sueño, como muchos han demostrado, por lo que no cabe que existan sueños en el interior de otros. Esto lo deja muy claro: no hay más realidad que la del sueño original (otra cosa sería imposible lógicamente) y, dado que esta es de por sí un frenesí e una ilusión, si toda la vida va a ser así vale la pena desestimar todo lo demás.

Porque, como se sabe, los fantasmas no existen. Más que en sueños.

viernes, 25 de julio de 2008

Asturias en Llagostera (que trata sobre cierta reunión de "trabajo" de MeriStation)

Hoy a la hora de comer me he acercado al pueblo donde está ubicada la redacción de MeriStation. No se trata de un lugar con 500 puestos de trabajo ocupados por otros tantos redactores (a disgusto del jefe, cabe decir) porque alguna ventaja tenía que tener esto de internet.

Aprovechando que la facción asturiana de la redacción se encuentra de visita en nuestras tierras, Langostinera ha sido el lugar de encuentro para la reunión de trabajo que tan amablemente han organizado la versión catalana de Stan Laurel y Oliver Hardy, junto con Anna - sou - uns - xavas y el jefe del área técnica (que siempre queda mejor que decir Markus).

No hemos dejado títere con cabeza, porque tenía muchas cosas que decir y muchas ganas de decirlas - nada nuevo bajo el sol, quede claro, pero con lo que me gusta argumentar no iba yo a perder una oportunidad de tal tamaño - y como se suele decir, la ocasión la pintan calva. Como yo.

Eso sí, me ha costado un compromiso con el rey de la sidra a crear contenido bloguil en MeriStation por lo menos a diario, en jornadas laborables. Tod sea por el engrandecimiento de nuestra patria.

jueves, 24 de julio de 2008

17 días, 16 noches (que trata sobre porcentajes, muy brevemente)

Tras la friolera de 17 días y 16 noches, por fin mi padre pasa una noche en casa. Parecía que el alta no quería llegar, después de fiebres de última hora e informes que se pierden en momentos inoportunos.

Si uno se para a pensarlo, de los últimos cuatro meses, mi padre prácticamente ha pasado más de uno entero en el hospital. Normal que tuviera ansiedad por las noches pensando solamente en abandonar aquella habitación; son demasiadas noches, uno es demasiado mayor y el tiempo pasa demasiado lentamente. Es casi una salvación que, si nada lo fuerza antes, la próxima visita con un médico no sea hasta dentro de un mes y la siguiente en diciembre. Parece casi impensable. Las cirugías de tipo digestivo son siempre palabras mayores y si no que se lo pregunten a una mujer de la misma unidad que mi padre, que lleva un año y medio ingresada con más de una veintena de operaciones a sus espaldas. Su ilusión es que, si todo va bien, podrá llegar a casa antes de estas navidades. Sinceramente, espero que valga la pena.

Lo único que tiene de bueno el hospital es que allí estás mayormente tranquilo ante cualquier eventualidad que pueda surgir derivada de un imprevisto, que no sería la primera vez; y dadas las circunstancias siempre te quedas un poco inquieto. Evidentemente, esta no ha sido la principal fuente de tensión sino que ha sido, puede decirse sin pudor, la misma de siempre. La misma desde que tengo uso de razón. Y me resulta hasta altamente molesto que sea tan difícil de comprender por el resto de la gente.

Es cierto que en muchas cosas no puedo ser plenamente objetivo - no creo que nadie pueda serlo completamente en todo - pero no soy un ignorante y conozco exactamente qué es lo que me altera, qué es lo que me ayuda y qué es lo que no me ayuda. Hoy nada. Nada de nada.

miércoles, 23 de julio de 2008

Risto, que te den! (que trata sobre OT y el "todo vale" televisivo, presentadores populistas y demás)

Ayer, afortunadamente parece que por última vez en unos meses, emitieron Operación Triunfo. La "gran final". Operación Triunfo es, en teoría, un concurso de intérpretes musicales en el que una serie de concursantes compiten entre sí para averiguar, trámite nominaciones del jurado y tras el veredicto de la audiencia, quien es el mejor de todos ellos. Durante un número determinado de días, los componentes del elenco conviven en una academia creada para tal ocasión donde reciben formación a todos los niveles: musical, técnica, física, coreográfica, teatral...

El programa, convertido por Telecinco en un pseudo-reality con los que ya tiene experiencia, lo conduce Jesús Vázquez, destacado icono del movimiento de liberación homosexual (por lo que ha recibido grandes e importantes premios) y ex-presentador del también magazine musical "La quinta marcha".

Semana a semana, gala tras gala, los aprendices de cantante han ido interpretando una serie de temas a veces por imposición de la propia dirección del concurso y otras por selección propia. Tras terminar sus actuaciones, un jurado compuesto por 4 miembros (Javier Llano de Cadena Cien, Noemí Galera de Gestmusic, Cocó Comín y Risto Mejide) ejercía una valoración al principio vinculante y al final simbólica al respecto de lo que les había parecido el espectáculo. De ahí salían una serie de "nominados", cuatro por vez, de los cuales uno era salvado por los profesores y otro por los compañeros. El duelo final entre los dos restantes era decisión soberana de la audiencia.

Y hasta ahí acaba la teoría.

Tras seguir forzosamente el concurso todas estas semanas, poca de esa teoría se ajusta a la realidad de lo que se ha visto en pantalla. Para empezar y desde luego lo más importante, a pesar de que a muchos se les llena la boca con la expresión de la "soberanía de la audiencia", la realidad es que el ganador de esta edición ha sido la peor, con diferencia, de todos los intérpretes que llegaron no solamente a la final sino del elenco entero. Había un concursante muy destacado del resto, que ha ofrecido 16 temazos sin NINGÚN error en todas las semanas, que se ha esforzado a tope y que ha interpretado sus canciones maravillosamente que ayer quedó tercero. Pero incluso el que quedó segundo, el favorito de las niñas por su supuesta sensibilidad como intérprete y su calidad vocal (sans intention comique, o sea, SIC), era infinitamente superior a Virginia, a la postre ganadora del certamen.

Esta chica a punto estuvo de ser expulsada de la academia por el pobre espectáculo y las constantes desafinadas vocales que exhibía en la gala, nominada vez tras otra y salvada por la audiencia en repetidas ocasiones mientras otros concursantes de indudable mayor talento iban cayendo eliminados. El hecho de que fuese ella la que ganara, desde mi punto de vista, ya quita el último resquicio de verosimilitud a OT, por mucho que la decisión, por soberana, siga siendo legítima.

Curiosamente, esta chica ha vivido una relación extraña con el personaje más popular y a la vez impopular y que, al final, se ha convertido en una importante atracción del show: el publicista Risto Mejide. Risto, supongo que en un alarde de ironía, desarrolló una campaña de mercadotecnia alrededor del peor de los concursantes, tal vez como burla hacia al concurso, que a la postre le ha salido bien. Argumentó varias veces que "el karaoke más grande del mundo" era una farsa y, por ende, por qué no que ganara el peor de todos. Los tímidos aplausos ayer del público, el nulo entusiasmo por parte de los profesores de la academia y la frialdad con la que se tomaron la noticia el resto de compañeros de Virginia al escuchar su nombre como ganadora (por otro lado, una niña victimista e insoportable) ya dicen mucho de lo acorde que se encontraban con la cacareada soberanía de la audiencia.

Justo antes de abrir el sobre que la proclamaría como tal, pero, ese pedazo de presentador arcoiris hizo una pausa para airear una nueva desavenencia entre él mismo y Risto Mejide. Risto, o el personaje que interpreta si es que es así (cosa que todos dan por supuesto y yo, por lo menos, pongo en duda), se ha caracterizado por mantener unos modales impropios de un galán de telenovela, al dirigirse demasiadas veces en tonos y contenidos despectivos hacia todo lo que le rodeaba: concursantes, canciones e incluso el jurado mismo o el programa en sí. Nada estaba a salvo de sus comentarios, antaño con más gracia y miga que en estas últimas entregas, que le han enfrentado con obviamente los principales objetos de sus críticas - esos magníficos ejemplos de la juventud más ilustrada y modesta que son los concursantes - y que han dividido a los espectadores entre los que consideran que "se pasa" y, por otro lado, los que creen ver la verdad más pura y dura entre la paja de su verborrea.

Como decía, no son pocas las puyitas que Jesús Vázquez, el presentador más populista de los últimos tiempos, le ha lanzado en directo y tampoco son escasas las veces que Risto se ha defendido. Pero ayer, nadie sabe el motivo, a la hora de entregar el veredicto que nombraba flamante y legítima vencedora a Virginia, Risto no estaba. Había dejado el micro y se había ido, según parece nadie sabe por qué o, por lo que me temo, nadie quiere decir el por qué. En el chat, una de las chicas confirmó que ellos no sabían nada. Igual le entró descomposición intestinal y se estaba cagando por las patas abajo, igual se estaba muriendo su madre o igual, simplemente, quiso irse. Pero no estaba, ese es el caso.

En ese momento, cuando no podía defenderse, valientemente salió el paladín a escena. El hombre que acapara portadas en los orgullosos desfiles por el madrileño barrio de Chueca, aprovechó la ocasión brindada que había estado esperando y lo anunció, en un alarde de caballerosidad que le honra: "Lo voy a decir, escuchadme todos, que lo voy a decir! (mirando a cámara). Risto, que te den!", para luego añadir, ya de espaldas a ésta pero intercambiando cómplices miradas con los concursantes - especialmente con Iván Santosnosénisentarmeenunsillón, por algo será - que "después de tanta tontería, anda hombre, que se vaya ya a...". Pobre Jesusín, cuánto y cuán duro ha tenido que aguantar este hombre que necesitaba, lo necesitaba de verdad, expresar ante millones de espectadores lo que lleva dentro y aprovechando que era la última gala y no habría opción de réplica. Menos mal que rápidamente una de las concursantes, curiosamente la que interpretará el papel de María Magdalena en un musical (papel que, dicen, lo debe llevar muy interiorizado porque le sale muy natural), le dio la razón al presentador acto seguido para que no se sintiera tan solo ante esta proclamación de tanta verdad junta y sentimientos encontrados. Si es que, en el fondo, es demasiado buena persona.

La calidad humana del equipo OT al completo se observó poco después. Solamente Mónica Naranjo abrazaba a la victoriosa, mientras las caras de los otros concursantes (especialmente la del patético-histriónico Iván Santos) eran un poema. Nadie fue a felicitarla, NADIE, contrariamente a lo que había ocurrido en anteriores ediciones. Los profesores tampoco. El jurado, con Risto ausente, tampoco. Plas plas y basta, que se note que gana y que unos la envidiamos, a otros nos parece injusta la sobreanía audiencil y al resto nos jode. Qué majos y qué buen rollo. Paradigmático.

Estoy contentísimo por esta edición de OT no tanto por el concurso en sí, una mediocridad salvo honrosas excepciones, sino por el experimento social que pudo verse ayer. Pudo apreciarse mucho la verdadera pasta de la que están hechos todos sus integrantes, especialmente los colegas de Virginia que no tuvieron ni la más mínima muestra de compañerismo ante lo que es una legitimisimísima victoria, que diría Papuchi Iglesias, por encima del resto. Sí, por encima tuyo, Iván Santos, y de tu queridísimo Pablo. Ante esta grave muestra de falta de calidad humana, tantos de unos como de otros, solamente queda decirles una cosa:

Chicos, que os den!

martes, 22 de julio de 2008

Las falsas alarmas y los cuentos que nunca terminan (que trata sobre la luz al final del túnel convertida en locomotora que viene en tu dirección)

El día no empezaba bien, esa es la verdad, porque una de esas llamadas extrañas al móvil demasiado pronto por la mañana no te dejan buen cuerpo. Puede que en los hospitales se cure a la gente en lo que respecta al cuerpo, pero la mente se debilita. Hoy hace dos semanas que mi padre está en el hospital y el hombre está muy cansado de tantos hospitales. Y su mente también.

Aunque a lo largo de la jornada han ido apareciendo los claros, en gran parte debido a las noticias que llegaban de bellvitge pero también gracias a Meri, con quien hoy hemos sabido entendernos mejor después del chasco de ayer.

La historia es que en principio a mi padre le podrían haber dado el alta mañana. Ha sido balsámica esta noticia, como mano de santo. El alta hospitalaria para el día siguiente, toma ya. Pero parece que el destino no quiere dejarnos en paz o, por lo menos, todavía no. Por la tarde han aparecido unas décimas de fiebre y, por protocolo, lo más seguro es que eso demore 24 horas más su salida de la habitación. Él, pero, todavía no lo sabe.

A veces se tiene la sensación, cuando se cumplen más de 8 meses desde que esto empezó, que en realidad no va a terminar nunca. Como si siempre fuera a aparecer otra cosa que vaya a estropear lo que parecía que iba mejor, como ha sido durante estas últimas 40 semanas.

¿O es que acaso los problemas no se van de vacaciones?

lunes, 21 de julio de 2008

El que diferencia los niños de los hombres (que trata sobre un partido más que sin embargo sí quiero recordar)

Lo primero, las cosas claras: un partido de un campeonato de mierda en un club de mierda en el que somos cuatro gatos y mal contados. Lo anticipo porque a lo mejor, releyéndome en el futuro, pienso que he ganado el US Open o algo.

Ayer jugué un partido interesante y hacía mucho tiempo que no tenía tan buenas sensaciones en mi raqueta. Hacía mucho tiempo que no jugaba bien. Y ayer jugué bien. Para ganar la final del social lo peor que podía suceder es que me tocara ese rival por algunas razones subyacentes que no vienen al caso pero, por encima de todo, porque está varios peldaños por encima mío en cuanto al nivel. Tiene más tenis, esa es la realidad.

Lógicamente, nadie daba un duro por mí. Edo vaticinaba que no pasaría de primera ronda, JL recordaba el 6-0 / 6-0 que había sufrido un año antes a sus manos y ni incluso los más optimistas como Manel me daban demasiada cancha. "Está verdaderamente difícil", le dijo a mi padre entre risas la tarde anterior en relación al partido de la mañana siguiente, cuando fue a visitarlo el sábado al hospital. Ni tan siquiera yo mismo me daba crédito: incluso había pensado en escribir dos tipos de entrada, una jugando bien y con un resultado adverso ajustado y otra jugando mal y con un resultado adverso fácil. Vamos, 6-4 / 6-4 ó 6-1 / 6-2. Pero siempre perdiendo.

La ventaja de todo esto es que sales a la pista sin ningún tipo de presión. No eres favorito. No tienes nada que perder. Estás relajado, contrariamente a lo que me pasó en la anterior ronda, y las cosas empiezan a fluir. Pegas bien a la bola, restas bien los servicios (y cuando alguien te los saca a 200 km/h de forma consistente es un buen mérito) y estás cumpliendo con los tuyos. Hice un primer set de escándalo y tenía 5-0 y saque para al final acabar ganando 6-1. No hacía calor y las bolas corrían todo lo que debían. Mi rival fallaba bolas y, cosa muy extraña en mí, yo estaba extraordinariamente consistente. Cuando no cometes errores no forzados te conviertes en un rival complicado.

En el segundo set, volví a ser yo mismo. También empezaba a acusar el cansancio (mi estado de forma actual me permite jugar... 45 minutos óptimos de tenis para empezar a bajar el nivel) y empecé a fallar bolas. Con 3-3 tuve varias bolas para ponerme por delante y cedí el juego, viniéndome abajo para acabar perdiendo el set 6-3.

Al principio del tercer set, estaba empezando a radiar demasiado lo que pasaba, especialmente porque tenía la sensación que no se lo estaba haciendo ganar sino que se lo estaba regalando. Sucede cuando piensas, por primera vez, que puedes ganar. En ese momento, la serenidad de Manel en la pista fue providencial, al conminarme interiorizar estos pensamientos para favorecer la concentración. El sistema no falló. En el momento crucial, de nuevo con 3-3, conseguí ponerme por delante y ganar mi saque posteriormente, para ponerme luego con 5-4 y servicio.

En este momento, en el juego que diferencia a los niños de los hombres, estaba tranquilo. No me temblaba la raqueta como en otras ocasiones. Estaba tarareando "Dance" de Jamiroquai y mi servicio volvía a entrar: dos puntos de saque, un Ace y un peloteo corto me hicieron ganar el partido.

Ciertas son muchas cosas: que yo jugué muy bien, indiscutible. Que mi rival no jugó muy bien, indiscutible. Que ninguno estaba en la plenitud de sus facultades, bien porque uno estaba enfermo y yo que había dormido 7 horas en dos noches (la primera me quedé en el hospital, dormí 0). Que la trascendencia de este partido es - 817324. O sea, nada. Pero sin embargo, tuve muy buenas sensaciones en la pista; recordé vivamente el por qué me gusta tanto el tenis y como debe enfocarse un partido difícil, que no es poco. Y que hay que jugarlos todos, por si acaso.

Hoy, sencillamente, juego mejor al tenis que ayer. Y eso debe celebrarse. Digo yo.

viernes, 18 de julio de 2008

Una petición inusual y el refrán del Rey (que trata sobre el hecho de pedir algo y de comprender cosas a posteriori)

La última vez que tenía el ordenador encendido en el hospital era para hacer PACs. Ahora estoy en pleno descanso lectivo, digamos, hasta supongo finales de septiembre. Hoy he hablado con mi tutor y dice que mi rendimiento fue sorprendentemente bueno xD Y yo que pensaba que ponerme a mí, el rendimiento bueno y la palabra "sorpresa" no podían encajar juntos en una misma frase...

El caso es que justo antes de irme del hospital, como cada día, le he preguntado a mi padre si quería que me quedase. Especialmente en fin de semana no me supone agravio ninguno, dado que mañana no trabajo. Genuinamente, no victimosamente, me ha dicho que ni hablar, que no servía para nada (tengo mis dudas al respecto, peeeero...). Lo raro es que, apenas 10 minutos más tarde, me ha llamado al móvil por si mi oferta continuaba vigente y para escuchar de nuevo, por mucho que lo supiera, si mi oferta era igual de genuina que su "no" de antes. Lo sorprendente del caso es que me ha pedido que me quedara, lo cual es extraordinariamente inusual.

Debe ser cierto, porque todo el mundo lo dice y por lo que mi limitada experiencia al respecto así reconoce, que los pacientes de larga duración cambian. Por lo visto es casi un hecho objetivo, una realidad que viven montones de familias a diario. Yo también he notado cambios en la actitud de mi padre, especialmente tras uno de los episodios aquí en el hospital en el que me parecía que no estaba poniendo todo de su parte y que me llevó a mantener una airada discusión a pie de cama, que más bien se convirtió en un ejercicio de retórica porque lo que es hablar no dejé mucho. Y eso que "pragmática y discurso" son 7,5 créditos del semestre próximo. Que se agarren mis contertulios a partir de entonces xD

En esa discusión y a raíz de lo que comentaba hace un momento, le expuse punto por punto cuales habían sido sus argumentos teóricos - y en los que había basado su línea de actuación - para con los otros enfermos que se había encontrado en su vida y que, curiosamente, ahora estaba pasando por alto. Supongo que la frase de Elvis, el Rey, cobra sentido aquí:

"Don't criticize what you don't understand. You've never walked in that man's shoes."

jueves, 17 de julio de 2008

Debilidades y esclavitudes (que trata sobre aquellas personas que por una u otra razón viven pendientes de algo)

Hoy en día, el que más o el que menos ha desarrollado una dependencia hacia algo. Muchas veces no es una dependencia real: el móvil, internet, los videojuegos, el trabajo (algunos), el deporte... Son cosas de las que pensamos que a lo mejor no podemos prescindir, aunque en realidad sí.

Pero hay otras de las que mucha gente, simplemente, no puede. La más conocida es probablemente el tabaco. Si uno se para a pensarlo, es estremecedor que toda la complejidad de un ser humano, desde el conjunto de órganos y moléculas que forman físicamente nuestro cuerpo hasta aquello tan inmaterial como la mente, se reduzca a un mísero tubito de escasos centímetros que es necesario quemar. Y es necesario hacerlo ya. Porque si no... la muerte, por lo menos.

Muchas veces, en observar casi las crisis ansiosas por el tabaco que no está o las manos que lo primero que hacen al salir al aire libre es buscar el cigarrillo, siento rabia. Cuando estoy en paz, siento pena.

Muchos - especialmente fumadores - argumentan que no existe tal dependencia o tan profunda. Que si fuman es porque quieren. Puede ser correcto, no lo niego, pero también lo es que cuanto más alto lo gritan a los cuatro vientos menos capaces son en realidad de dejarlo. No quieren, desde luego, pero tampoco pueden. Es un poco la filosofía de las manzanas inalcanzables para la pequeña zorra (sin segundas): "están verdes".

Otros, los menos, realmente lo controlan. Fuman - tanto - por placer (sic). El resto, no. Triste, pero no. Sinceramente, tal y como yo lo veo, espero nunca llegar a depender de nada a ese nivel. Y si alguna vez lo hago, espero que sea por algo de mayor entidad.

miércoles, 16 de julio de 2008

Rendimientos y sabotajes (que trata sobre raquetas, de forma ligera, más una reflexión añadida)

Desde hace meses, mientras juego a tenis y especialmente durante el servicio, el brazo derecho me duele. Aproximadamente 7 centímetros más abajo del codo (no es la tendinitis clásica), en el antebrazo. El otro día mientras cambiaba el grip de la raqueta descubrí que tenía alrededor de 10 gramos de plomo añadidos en el mango, seguramente para compensar los otros 10 gramos que ya en su día quité de la cabeza.

10 gramos no parecen mucho (bueno, depende de qué sean esos 10 gramos) pero al parecer sí lo suficiente como para causarme dolor; que te duela en el brazo es un problema, porque inconscientemente cambias el swing de tus golpes para evitar el dolor. Y eso, en definitiva, no es bueno. El otro día le quité el peso extra y ahora no tengo mucho control, pero parece que mi brazo aguanta. Estoy seguro que Manel me había saboteado las raquetas.

El caso es que últimamente no estoy jugando bien. Ni tan siquiera me siento cómodo en la pista y estoy perdiendo juegos con demasiada facilidad; no subo a la red con convicción, mi servicio está muy resentido y, desde que mi padre está en yendo arriba y abajo en el hospital, mi nivel está en franco declive. Qué tristeza. Hoy puedo decir que soy peor jugador que ayer y eso, para alguien que siempre mira hacia adelante, es una putada de las gordas.

Además, siempre me he considerado alguien con un gran control mental; pero ahora estoy empezando a pensar que tal vez las cosas me afecten emocionalmente.

¿Seré humano?

martes, 15 de julio de 2008

Acechando damiselas (que trata sobre mujeres, especialmente las bonitas, y de los lugares susceptibles de acechamiento)

Atrás quedan aquellos años de caza. Cuando llegábamos a una discoteca en plan artesano, con la intención de pescar con caña (como el bonito) y acababas en plan faenero de alta mar ilegal, soltando la red de deriva y atrapando allí a cualquier cosa que se dejaba. Pezqueñines y pezfeines inclusive.

Hoy los tiempos han cambiado; o tal vez no y simplemente el tiempo ha pasado para mí. Sin embargo, sigo conservando la habilidad de detectar puntos especiales de acechamiento hembril y aunque no vaya a profundizar en ellos - por muchas razones pero entre ellas porque no procede - siempre me hace gracia analizar las posibilidades.

Puesto que me limito a la mera y agradabilísima profesión de observar, me encantan aquellos lugares en los que se pueden observar ingentes cantidades de mujeres (y guapas) simplemente para el deleite de la vista. Aquí reflexionaré sobre algunos.

La playa: contrariamente a la sabiduría popular, la playa es el gran oasis de las decepciones. El bikini - no así el burkini - no deja lugar a la imaginación, con mayor énfasis cuando no hay parte de arriba instalada en el sujeto observado. Y aunque la mente adolescente pirata puede pensar "teta a la vista!" en realidad lo que probablemente catará será un cúmulo de despropósitos uno tras otro que no hacen sino confirmar el viejo dicho que argumenta que todo lo que tapa, favorece. Hay que ver la INMENSA cantidad de pechos feos que hay ahí afuera, y generalmente vienen de dos en dos además situados simétricamente (mentira también, a veces, pero bueno) uno a cada lado. Impresionante el poco decoro que exhiben la mayoría de hembras (chicas y mujeres por igual, pero las primeras con mayor delito por lo de la temprana edad que, en teoría, sitúa mejor las cosas en su sitio) al mostrar sus glándulas mamarias. Debería existir una ordenanza municipal contra ese tipo de comportamiento: teta fea, teta oculta.

No solamente se limita al tema pechil el problema, claramente, porque mientras que tras un vestido la silueta se insinúa perfectamente, la ausencia de fuerzas sustentorias se nota cuando éste falta. Algo que aplica también a los hombres, vale decir, en su grandísima mayoría - incluso mayor que en su contrapartida fememina. Solución: si tienes el pecho bonito, ole, muéstralo. Por favor. Si no, guárdalo. POR FAVOR.

La playa también tiene algún problema añadido: primero, si quieres verle el pecho a una chica que te guste, haz todo lo posible para no conocerla. En el momento en que haya un primer contacto, ñaca! Teta que se esconde. WTF? Pero... por qué? Es algo que nunca he llegado a entender. Es decir, le enseño los pechos a todo quisqui pero a tí, que ahora ya te conozco, me da mal rollo. En fin. Tampoco el ligoteo es fácil: 1) el brinkindans. 2) puede tener novio que esté jugando al volley-playa. 3) y puede medir 2 metros y medio. 4) y puede tener amigos a juego con su tamaño. Resumiendo, que la cosecha de la playa abunda pero la calidad escasea. Motenai dixit.

El aeropuerto: Una de mis zonas favoritas y tiene sentido que así sea. En el aeropuerto hay, literalmente, centenares de niñas. Además, excluyendo la temporada de verano - ahora se verá por qué - siempre suelen ir muy bonitas. Y ver a una mujer sola viajar es ALTAMENTE excitante. El verano, como decía, tiene un par de contrariedades: la primera, que mucha gente solamente pilla un aeropuerto en vacaciones y se les puede ver desorientados - destrempador maximus - y van con atuendo veranil: camiseta sudada y con rodales por la carrera al haber llegado tarde al aeropuerto, moño hecho en 2 nanosegundos porque había prisa al salir de casa, cargando una maleta que pesa 14 quintales del que asoman el cable del alisador y el paquete de támpax... que será muy normal pero no inspira a la calentura.

Sin embargo, fuera de la temporada de estío, impresiona ver la cantidad de mujeres que hay en el aeropuerto y, por norma general, el nivel parece superior al de la calle. No solamente porque el traje-chaqueta - cuando aplica - favorezca, sino porque incluso yendo "normal" una chica que camina decidida hacia su puerta de embarque tiene un algo. Además, si tienes la fortuna de coincidir con alguna en el asiento del avión, bastan un par de trucos sencillos para que sea ella la que empiece una conversación sin que parezcas un buitre (más sobre esto otro día). Además, si está de viaje de ida a la ciudad que tu vas, siempre puedes tentar a la suerte si hay buen feeling, apelando a que ciertos acuerdos realizados en origen no tienen vigencia en otra ciudad / otro país (este argumento es difícil de sostener ante tu pareja, claro está). Pero como poco ya tienes el 25% del camino hecho, casi nada.

El Hospital: Hacía tiempo que quería hablar de este lugar y nunca encontraba el momento. El hospital está REPLETO de monadas en un ir y devenir constante. Hasta puntos realmente sospechosos, que porque sabes que la seguridad social es deficitaria que si no te plantearías si realmente las "fichan" para que se paseen por las puertas para atraer más clientes. Pero lo principal y más importante es que hay que rehuír el viejo cliché de las enfermeras; OK, hay buena cantidad de preciosidades en bata blanca y, especialmente en el ICO, son extraordinariamente simpáticas. Y auténticas, cosa doblemente difícil. En Bellvitge son más estúpidas, por regla general aunque con honrosas excepciones. Es cierto que el discurso de imaginar montártelo con una enfermera en su sala de descanso nunca pasa de moda pero seamos realistas, esto no es Anatomía de Grey.

Yo hablaba de niñas de calle, de las que van de visita, de las que están con algún familiar. Las primeras son complicadas, rara vez acuden solas. Pero las segundas... ahí está la clave. Para empezar, ya tenéis algo en común con lo que puedes hacer surgir un tema sin sospechas: el paciente. Que uno puede decir: feo, muy feo, utilizar a tu padre enfermo para ligar. Pero si tu propio padre te dice que cualquier excusa es buena (inclusive esta) para un buen fin... hombre, no serás tú el que vayas a desoír un sabio consejo paternal, digo yo; por otro lado, si tú estás de guardia (y te lo puedes montar para que así sea) sabes que vais a pasar un montón de horas juntos. Obviamente si la cosa no va bien (su familiar no prospera) será jodido, aunque nunca se sabe - es feo decirlo, pero así es. Si por contra la historia va como es de esperar, mucho mejor porque habrá que compartir la alegría con alguien... y generalmente es el más cercano. Aquello de "en el momento justo y en el lugar adecuado" se dijo pensando en los hospitales. Si tiene pareja y está sola no hay problema, solamente habrá que tantear cómo funcionaría una estrategia de acoso y derribo contra el maromo insensible que no está a su lado y que prefiere ir a jugar a fútbol sala con sus amigos en lugar de apoyarla - como tú estás haciendo - en estos tan difíciles momentos. Y listos. Sí, manipular guarramente vale. Lo que yo diga.

Pero si te limitas a la observación, también quedas plenamente satisfecho, como en los dos casos anteriores. Muchas veces el hospital es un alarde visual que haría las delicias de los "graphic-whores", con maravillas a todo color y con un despliegue de efectos de aplauso. Creo que voy a tener que hacerme una camiseta con la expresión "WTF?" para enseñarla cada vez que veo pasar a una de estas cosas por delante mío y, además, como en el hospital hace fresco, no van como pendones a la playa.

En fin, me dejo muchas cosas en el tintero, a ver si otro día lo añado.

lunes, 14 de julio de 2008

Calzonazos gatil (que trata sobre una reflexión masculina en clave felina)

Que los hombres son (somos) unos calzonazos es una evidencia que va más allá de cualquier discusión. No hay hombres que no sean unos calzonazos; hay hombres que todavía piensan que no son unos calzonazos. Todo llega y, generalmente, siempre hay mujeres de por medio en la ecuación.

Esta vez no. Es decir, me descubro de nuevo siendo un calzonazos, pero esta vez no hay ninguna mujer implicada. Eso sí, casualidades del destino, también es una hembra.

Mientras en otros blogs se pelean efusivamente con sus problemas médicos, muy graciosos todos ellos, yo me peleo conmigo mismo por mi falta absoluta de firmeza para con una vieja inquilina de mi jardín: una gata. Hoy es la segunda vez que le compro comida a una felina que ni tan siquiera es mía (ni vive conmigo), que es moderadamente borde - aunque debo admitir que también ella se ha ablandado un poco, probablemente por necesidad - y que se dedica a romperme el corazón cuando salgo de casa mirándome con la cara tipo Puss in Boots de Shrek. Una cara que, todo sea dicho, parece que equipan de serie.

Resulta que la gata está embarazada. Otra vez. La tercera, vamos. Y claro, pobrecita, como se dedica exclusivamente a follar (sin protección, obviamente) pues normal que se quede preñada. Lo que no es tan normal es que se le tenga que cocinar pescadito para la pobrecita gatita embarazadita que tiene hambrecito. Que hay que tener cojones. Además, esto es buenísimo: hasta el día de hoy pensaba que en esta vida mayormente o follas o comes. Es decir, que si te cocinan mucho follas poco. Y si follas mucho, te cocinan poco. Pues NO! Basta ser gato para que se altere el logaritmo: follan mucho y además, te cocinan y te ponen la comida en el platito. Pescadito calentito. Ojo, si tengo que escoger entre una opción y la otra, prefiero 500000 veces tener que ir a un restaurante xD

Yo le he comprado comida normal porque EVIDENTEMENTE no me voy a poner a cocinar para la gata que, además, ni tan siquiera se acerca cuando vas con buenas intenciones. Tienen que alinearse 14 planetas y la radiación solar estar por debajo de los límites razonables para que la gata, en un alarde de cariño sin precedentes, se te acerque a ronronearte. Que la segunda vez que tuvo crías AL IGUAL me dejaba acercarme a ellas, y eso que recaté a una saltando por encima de los coches, colgándome de una de las lianas del jardín y matando a la anaconda que se la quería comer. Se la devolví, dejándola en el suelo cuidadosamente con mis trabajadas manos curtidas por el fragor de mil batallas... y encima me bufa. Tuve que irme para no fulminarla con una mirada de mi necrovisión.

Y además que la gata es fea de cojones, que tiene delito y todo. Que dices, coñe, si es como uno de los gatitos blancos de Yanín, pues ole. Pero esta es atigrada, pero un atigrado FEO. Eso sí, las dos veces que ha dado gatitos, cuatro por vez, han tenido su encanto: uno blanco completamente, uno negro completamente, uno atigrado y feo como la madre y otro marrón claro. Que dices, coñe, como puede ser que haya esa mezcla, no? Yo pienso que como se la han follado tantos gatos distintos, ahí dentro ni los espermatozoides se aclaran.

En fin, que ahí la tengo, dormida en una silla encima de una de MIS toallas de playa - puesta al sol para que se secara, ahora puesta allí para que la gata esté más cómoda - y esperando a que un servidor le sirva su comidita en su platito. Que claro, se acerca la hora de la cena y hace hambre.

Tendrá cojones.

viernes, 11 de julio de 2008

El poder de la información (que trata sobre decir lo que se tiene que decir y nada más)

Iba a hacer una entrada acerca de la información que uno posee y la que debe compartir con aquellos que no están en la mejor de las posiciones (de gas rancio) para recibirla. Sin embargo no puedo porque no me dejan. Me están arrastrando a ver Lost. Actualizaré mañana. Por cierto, Lost es genial. Vale, ya paro. En serio, estoy terminando. Que sí, que dejo de teclear.... wqehpqion

jueves, 10 de julio de 2008

Aprensiones (que trata sobre debilidades en general, especialmente en lo que concierne a las médicas)

Algunos somos aprensivos. Así, por naturaleza, con las tonterías más grandes. En mi caso, por ejemplo, no me inmuto ante el dolor o el sufrimiento ajeno. Tampoco la muerte causa gran efecto en mí.

Pero las agujas... es que me pinchen y caigo. Recuerdo varios momentos al respecto: previo ir a Africa, por ejemplo, cuando me pincharon la de la hepatitis. Claro que aquello no era una aguja: era un torero que me enfilaba para darme la puntilla. Incluso cuando me clavó aquella espada de samurái me pareció escuchar "oooooole" en el respetable. Justo antes de caer al suelo, claro. Comparto esta debilidad con mi FC, curiosamente, de 190 cm, que también cae a la mínima que ve una jeringa.

En otra ocasión, me dio una bajada de tensión en el oculista cuando me miraba el fondo ocular. Ese láser azul tenía un componente maligno, lo sé.

Hoy, al visitar a mi padre en RPQ, por la mañana no he tenido ningún tipo de aprensión. Y eso que llevaba más tubos que un Borg de Star Trek. Hasta arriba estaba, entre cables y tubos había más de una docena. Han convertido a mi padre en un cyborg, oh Dios. Todavía no está en planta, esperaremos a ver mañana.

Hoy he visto, eso sí, algo que me ha dejado un poco... este... que me he tenido que sentar, vamos. La ostomía ya es, por definición, algo que impresiona: comunica las vísceras con el exterior. Ves las vísceras de un cuerpo humano, vamos, y eso de por sí no es algo natural. Hoy he visto un pedazo de intestino y no he sabido ni como mirar...

En fin...

miércoles, 9 de julio de 2008

Aún lejos, pero más cerca (que trata sobre diversos asuntos, de forma general y breve)

Varias cosas sin estar en orden de importancia, ni mucho menos:

- Gem y Rodge, como ya vieron, no necesitan de Las Vegas. You only need to hail to the King, baby.

- Hoy ha sido un día tenso, reviviendo parte de los horrores de hace escasos meses. Esperemos que con el mismo resultado exitoso, sin embargo. No tengo malas vibraciones.

- Un renglón para brindar por las coincidencias (avaladas positivamente por mi alter ego femenino, of course). ¡Por ese 99% de gente de Ibiza que no esquía!

- Por Ramón Campayo, qué coño, que va a evitar que no se pueda usar mi mala memoria como arma contra mí (tanto cuando ha sido verdad como cuando no). Ramón, eres un figura.

- Por este próximo sábado, qué diablos, que es una de las fechas más importantes de los últimos tiempos.

martes, 8 de julio de 2008

Back to the edge (que trata sobre la vuelta a la incertidumbre, brevemente)

Desde un tiempo a esta parte toca sufrir. Es lo que hay. Es como en el Un, Dos, Tres... que habían unos personajes que compartían el premio con los concursantes pero a ellos se les iba avisando de lo que había dentro de las cajas. Yo estoy en un lugar parecido, pero sin saber qué hay dentro de las cajas. Menudo juego de mierda, pues.

El caso es que ha llegado el momento de volver a sufrir, un poco más. Aunque se respira un clima de mayor tranquilidad que la última vez, no deja de ser algo importante con muchos riesgos y muchas posibles consecuencias. El hecho de que no haya clima de grandes ocasiones - y debo darme kudos por haber hecho todo lo posible para que así sea - me pone todavía más intranquilo, sentimiento que no puedo compartir bien por pereza, bien por prudencia, bien por imposibilidad.

Mañana es otro gran día.

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A todo esto, he aprobado mis primeras asignaturas (y he suspendido mi primera xD). Qué cosas, me siento al tiempo un chaval y alguien muy mayor. Pero sigo siendo el rey.

lunes, 7 de julio de 2008

Al César lo que es del César (que trata sobre tenis, entre otra cosilla)

Bueno, en primer lugar un par de apuntes rápidos. Hay que felicitar a Rafa Nadal por su triunfo de ayer en una final de infarto, 9/7 en el último set después de que Federer no supiera (o no pudiera) aprovechar las innumerables bolas de break que dispuso a su favor. Federer perdonó y lo pagó y hoy, da igual lo que digan y los puntos que atesore cada uno en su ránking, ya no es número 1. Cuando se gana Roland Garros y Wimbledon en el mismo año, demuestras que eres el mejor tenista del momento y punto.

De todos modos, a pesar de la derrota, Federer no debería irse con la cabeza gacha. Tuvo sus oportunidades y en su deber consta analizar el por qué no las materializó, como el hecho de en hierba ir ganando 4-1 y perder el set 6-4. Estas son las clásicas cosas que no te puedes permitir. Ayer me costó dormir, a pesar de que estaba muy relajado, porque no conseguía dejar de darle vueltas al partido y es que me estoy notando, al igual que ocurre con mucha otra gente con el fútbol, que el tenis y sus resultados me afectan. En fin.

El domingo tuve partido, uno de esos duros de verdad del que quiero anotar varias sensaciones. La primera, que entré nervioso a la pista y hacía mucho tiempo que no me sucedía; segundo, que jugar con una raqueta que no es la tuya un día importante NO es buena idea. Tercero, que por primera vez en años estuve dos horas y media en la pista, para ganar 2/6 - 6/1 - 7/6 (1). Acabando, eso sí, con un ace xD Mucha tensión, un rival con un interruptor on/off y una victoria sufrida. De la tensión, no tanto del esfuerzo, estaba agarrotado muscularmente ayer noche. Me hago mayor.

Sábado tarde vinieron Gem & Rodge, a traerme un regalo tardío de cumpleaños, pero no por ello peor recibido. Ehem. La cosa es que según Gemma, compró dos cosas que le recordaban a mí: una no la pongo porque no quiero (xD) pero la otra, es esta:


Sí. Es un fantasma xD

viernes, 4 de julio de 2008

Declaración Institucional (que trata sobre reflexiones a raíz de mis comentarios...jijiji)

El otro día hice una entrada que no venía a ser otra cosa que una narración fidedigna de unos acontecimientos que sucedieron en una pista de tenis y, al tiempo, una reflexión en voz alta. La entrada está aquí.

Pues bien; Manel, tal y como avancé en su momento, hizo una declaración institucional al respecto, que tengo a bien transcribir aquí:

DECLARACION INSTITUCIONAL

"Ante el conflicto que se produjo en nuestro último enfrentamiento, suscitado al parecer por una bola dudosa y la supuesta presión moral ejercida por una advertencia mía lanzada tras un (también supuesto) expolio de que fuimos objeto en un partido anterior, y con el fin de evitar ulteriores conflictos de pareja tenística, presiones a la hora de juzgar, así como crónicas ultrajadas (nota del t. jijiji :-) ) en ciertos blogs con la consiguiente espiral dialéctica que ello podría acarrear, deseo manifestar cuanto sigue:

Aún a riesgo de que alguien pueda sentirse tentado de aprovechar la circunstancia para sacar provecho de ello, y pese a poder ser considerado en ciertos círculos como un calzonazos que acata decisiones injustas sin tan siquiera acumular puntos para poder cepillarse a alguien en el futuro, declaro mi intención de no alterarme y de aceptar plenamente y sin reservas las decisiones de mis rivales sobre bolas dudosas, en aras de una plena cordialidad y fair play entre todos los tenistas, pueblos y personas del orbe.

Entiendo que sólo así, mediante la plasmación de las enseñanzas de nuestros maestros, como Stefan Edberg, sin olvidar al Dalai Lama y al Majatma Ghandi, podrán la paz y la armonía volver a reinar sobre ese rectángulo al que se ha dado en llamar pista de tenis.

Fdo.

Manel "Bio Tofu" Vanaclocha

P.D. El escáner no me va, si no pondría el papel original xD

jueves, 3 de julio de 2008

Formas e informales (que trata sobre corbatas y prendas de vestir)

El otro día en el Congreso de los Diputados, donde habita ese conjunto de señores y señoras que tan bien representan al conjunto de los españoles y que hablan y deciden en nuestro nombre gracias a la democracia, se formó un buen follón por una gilipollez.

Resulta que el ministro de industria, Miguel Sebastián, decidió ir al Congreso sin corbata. Como en su ministerio ha instaurado la norma de que no hace falta llevar esa prenda a menos que sea por un acto oficial, pues se presento al hemiciclo sin ella. A Bono, presidente del Congreso y también socialista, no le hizo mucha gracia preguntándose con algo de sorna que si un pleno extraordinario no era considerado por algunos como un acto oficial... ¿qué lo iba a ser? Así que le hizo llegar un regalito directamente de la tienda que hay de recuerdos en la planta baja del edificio: una corbata con unos leones estampados (símbolo inequívoco) para que se la pusiera.

Pero no, el ministrio de industria no cede. Que no quiere llevar corbata, que es una cuestión de principios. Que en su ministerio ha decidido subir la temperatura dos grados para ahorrar energía y, como hace más calor, no quiere que se lleve corbata. Y, por lo tanto, que no se la va a poner. A cambio, como si estuviéramos en San Valentín, le ha hecho otro regalo a su enamorado: un termómetro para que controle la temperatura de la sala, a su parecer demasiado alta y que deberían subirla un poco para ahorrar energía.

Para acabarlo de adobar, el ministro Corbacho (el de trabajo) ha decidido también solidarizarse con su homólogo de industria y también se la ha quitado, "con lo bien que se está sin ella". Será que el ministro de trabajo no tiene mucho ídem, con una tasa de paro en España del 10% y el mayor número de crecimiento de desempleo de toda la comunidad europea. Es lo que tiene España: que trabajo no hay, pero calor mucha. Corbacho espera, sin embargo, "que el presidente del gobierno no le riña". Jajaja. Ja. Desternillante el comentario.

Personalmente también opino que el traje y la corbata son elementos desfasados de protocolo de estar por casa. Llevar traje y corbata por obligación me parece algo anacrónico que imagino que en el futuro no se hará y, además, se reirán de nosotros por haberlo hecho. Ahora bien, la realidad es la que es. Está claro que no disminuye su rendimiento como ministro el hecho de que lleve corbata o no la lleve; tampoco el hecho de que lleve americana o no la lleve o, ya puestos, que vaya al Congreso en pantalón corto o bermudas, camiseta del último concierto de Melendi y chanclas. Y las gafas y el snorkel de Curro, el de las vacaciones. Total, la persona es la misma. Más gilipollas, pero la misma.

Recuerdo una breve anécdota que me contaba mi padre cuando fue a visitar en pleno agosto creo que la Alhambra de Granada (40 graditos buenos que no te los quita nadie), en pantalón corto obviamente, y no le dejaron entrar. Porque "aquí no se entra con calsone'". Tampoco en el Liceo te dejan entrar con la indumentaria de una despedida de soltero.

Pero volvamos al tema. Ya puestos, es un palo para algunos jugadores de fútbol estar ahí en línea quietos-paraos mientras suena el himno. Qué más dará, digo yo, que estén uno del derecho y otro del revés, si no va a hacer que jueguen mejor en el campo. Qué más dará, digo yo, el uso de los manidos "por favor" y "gracias" si total, no tienen ninguna utilidad práctica y así no perdemos tiempo en vocablos innecesarios. Qué más darán las muestras de cortesía al pasar o abrir una puerta si total, vamos a entrar los dos igual. Qué más dará que se lleven batas blancas (o verdes) en el hospital, con lo feas que son, si no entorpecen ni ayudan la labor de los médicos. Al contrario, les da más calor. Qué más dará el trato de Usted a una persona mayor, a un desconocido, a un cliente... si total, no sirve asbolutamente para nada.

Pues Sr. Ministro de Trabajo y Sr. Ministro de Industria, existe una razón de ser que no se la voy a explicar porque es auto-explicativa. Y si no la comprenden a raíz de los ejemplos nombrados en el párrafo anterior y tras admitir que en el fondo tienen su punto, probablemente no merecen el cargo que les corresponde. Pero claro, es más fácil hablar de corbatas y termómetros que de los males que tiene el país.

Olé, Sr. Corbacho y olé Sr. Sebastián. Que sí, que hace mucho calor. Ustedes a eso.

miércoles, 2 de julio de 2008

El ojo de Halcón (que trata sobre actitudes, manipulaciones y demás con la excusa tenística)

El ojo de Halcón es un dispositivo que se usa hoy en día en la mayoría de Grand Slams (excepto Roland Garros) que permite a los jugadores pedir la confirmación del bote de la última bola jugada mediante un sofisticado sistema de control de cámaras de alta velocidad que triangulan su posición y determinan su la pelota entró o no entró. Recuerdo Open Usa de 2006 como el primer gran evento en utilizar esta tecnología. Los jugadores reciben un número de "retos" (challenges) por set que se van restando en caso de equivocarse (como sucede en el fútbol americano, solamente que aquí no pierden un tiempo muerto).

El invento recibe incorrectamente el nombre en castellano de ojo de Halcón porque en inglés, Hawk-eye, es un juego de palabras con su creador, un tal Hawkings. En el Open Francés esta tecnología no se usa porque el bote ya queda reflejado en la pista, como bien le gusta a Nadal. Muchos jugadores están en contra de esta tecnología, ya que tiene un margen de error de más de 3 mm de media. Incluso Federer pidió en la final de Wimbledon contra Nadal del año pasado que lo apagaran, aunque más producto de la frustración que otra cosa (a pesar de eso ganó 6-2 en el quinto set, jijiji xD). Nadal también rabió en un partido contra Youznhi - al que destrozó anteayer en tres sets claros - porque según él le había astillado una bola que en tierra no le habrían astillado. Es que cuando sale de la tierra es como cuando sacas a un pez del agua xD

Total, que hace un par de semanas, jugando un partido a dobles JL Cano y un servidor contra M. Vanaclocha y X. Miquel, una volea de éste se fue fuera, por poco. JL la cantó out y yo verifiqué la marca - soy juez de silla nacional, digo yo que de esto sabré algo - y efectivamente había espacio entre el bote y la línea. Por ende, out. Pero a Manel le cambió la cara. Creía que había ido dentro y se ralló. Yo dejé el bote para que lo mirara cuando cambiara de campo (jamás dejo pasar a mi lado de la pista y jamás paso al lado contrario). Cuando hubo el cambio de lado, pasó, la miró, dijo que estaba dentro, que se la habíamos astillado y borró el bote. El partido lo ganamos muy fácil, esto ya era mediados del segundo y muy gorda tiene que pasar para que perdamos un set contra esa pareja; o sea, que qué más dará que una bola entre o se vaya fuera si al final supondrá que ese juego lo ganemos a 0 ó a 15, ya ves tú. Pero al acabar, Manel todavía seguía fuera de sus casillas (incluso dió bueno un saque de JL que había ido claramente fuera, ante el estupor de Xavi, su compañero, que la estaba marcando out). Pero Manel es de aquellos que quieren salirse con la suya. Al acabar, un "mission statement", casi un memorando, en el que anunciaba que si se le volvía a astillar una bola, se iba de la pista. Sin razón, pero bueno, hay que quererle con sus cosas buenas, con su bio-tofu y su seitán y con sus cosas malas.

Ayer Manel hacía pareja con Mirofski, que no se escribe así pero que me mola más ponerlo así, y sucedió una jugada similar. Un globo suyo por encima de mi cabeza me sobrepasó y, mientras yo corría hacia ella para hacer el willy (jiji) JL también para la cobertura. Él estaba a 3 metros, yo a apenas 1 y medio. JL la canta out porque, entre otras cosas, había ido out aunque, en la inercia de la carrera y como es muy habitual en el tenis, devolvió la bola. Yo ni la marco porque la había visto fuera clara pero, a mi espalda, oigo como el punto continúa y Manel o Dani, no sé, rematan y se chocan la mano. Yo me quedo mirando a JL pensando que tal vez no habían oído su "out" cuando Manel pregunta: "Ha entrado o no ha entrado?", a lo que JL responde que sí, que sí, que había ido buena y borra el bote. Me quedo flipando. Empiezo a perseguirlo por la pista preguntándole por qué y me dice que no había marca (mentira! si no hay marca, para qué borras el bote? xD) y que no la había visto bien. Coñe, pues que me pregunte, que estaba al lado.

Total, que me rallé de la hostia y hasta ese momento, un set arriba y 1-0 arriba en el que no había perdido más que dos puntos con mi saque, empecé a tirarlo todo fuera. No volvimos a hablar en todo el set que, naturalmente perdimos (OMG!). Al acabar, sin tercer set porque incluso Manel y Dani vieron que no estaba el horno para bollos, le pregunté que qué coño hacía. El caso es que me fastidia enormemente que un rival me astille una bola pero me fastidia TODAVÍA MÁS si me la astilla uno de mi mismo equipo. Pero ese no es el quid de la cuestión: le dió la bola buena porque se dejó manipular por las palabras de Manel un par de semanas antes: "Si me astillas otra bola, me voy de la pista". No se la habría astillado si la hubiera cantado mala, pero como tampoco lo había hecho la anterior vez, para no discutir se la dió buena. Y listos. Todo por lo que le dijo el otro. Que vamos, que seas calzonazos con una tía es normal porque al fin y al cabo sumas puntos para podértela cepillar. ¿Pero con un tío? Amos, hombre. Que no.

Aunque JL lo negó todo, la realidad es que estuvo rallado todo el juego ese en el que sacaba, porque les había dado un punto gratis que NO merecían y él lo sabía. Lo sabía como que tengo sangre en las venas.

Le dije que la próxima vez que me astillara una bola, me iría YO de la pista, aunque fuera su compañero. A ver si así, poniendo presión también desde este lado, se lo piensa dos veces antes de dejarse manipular por otro. Que vamos, que qué más dará, un partido de mierda y una bola de mierda. Pero que no, que es cuestión de principios; y éstos son más importantes y van más allá de un punto, un set, un partido o un deporte. Porque si me tienen que timar, que no sean los que van conmigo.

Hasta Manel, que hoy me ha dicho que mañana hará una declaración institucional al respecto (encima con cachondeo xD) cuando reeditemos el partido, creo que se ha dado cuenta de que tiene que vigilar con lo que dice. Porque cuando a mi me dice estas cosas, paso olímpicamente de él pero hay otros que, desafortunadamente, se lo creen. Y claro, pican con lobeznos y cervatillos. Argh, qué rabia. En fin.

P.S. Anabel dijo: "Un besote para él a pesar de todo...lamento no poder morderte, que en el fondo es lo que quieres...pero como habrás leído, no tengo las muelas para cachondeo!"

Anabel, hija, tú y yo sabemos que si hubiera querido que me mordieras, ya lo habrías hecho xD Que tengo 30 años y se la puedes colar a Vander, pero a mí no ;-)

martes, 1 de julio de 2008

All men are bastards (que trata sobre cuchillos, básicamente)

Hoy he pedido esta maravilla de una de mis webs favoritas, I Want one of Those. Como necesito cuchillos en casa y aprovechando que el silestone es rojo, qué mejor que esto:


Viene con los cuchillos incluídos. Desafortunadamente no hay una versión femenina (seguramente porque si la hubiera las feminatrix hubieran puesto el grito en el cielo) que, como apunta un comentario, se podría llamar "All women are bitches". Pero por lo pronto me parece cool, un poco freak y hasta de mal gusto para algunos. Por eso ese combo me mola tanto xD

Es el clásico cuchillero que encontrarías en casa de Gemma... pero que no tiene. Otras chicas, que no quiero decir su nombre aunque empieza por A y termina por nabel, dependen demasiado del macho ibérico como para permitirse tener un objeto de estas características.

Pero oye, te lo puedo dejar mirar.