miércoles, 10 de septiembre de 2008

La verdad reside en lo oculto (que trata sobre sueños, crípticamente)

Siempre hay momentos en que llegan imágenes difíciles de entender por diversos medios pero que al final no puedes contar. Si existe un buen fin para que esto suceda, a veces no lo entiendo. Desde esta noche estoy pensando en los sueños, especialmente en aquellos que te ves cumpliendo determinados actos impensables en uno mismo. Por ejemplo, durante el período de letargo me ha venido a la cabeza una imagen extraña. Un sueño tremedamente verosímil donde estaba en un autobús con un personaje de los de Lost y hablábamos de música, mujeres y otras cosas banales de mi existencia y de la suya, luchando por encontrar más sentido a la vida.

Esto es especialmente extraño en mí, porque nunca ha sido un problema la existencialidad, siempre siendo positivo en mi búsqueda de la felicidad. Aunque daba más y más argumentos durante todo lo que duraba esta conversación, parecía que mi interlocutor no hallaba el camino... y llegando a la desesperación durante el proceso, caía. Despues de lo sucedido, a priori creo que no era un temor de que pudiera sucederme a mí.

Después de lo que ha sido 1 de las noches más plácidas que recuerdo, la sensación de impotencia por no poder convencerlo es algo que no quiero volver a tener nunca, quiero ser capaz de insuflar esperanza y vitalidad con cualquier arma que esté en mi poder, incluso si debo utilizar de todas (aunque escasas en número, haberlas haylas) las armas puestas en mis manos. Me comprometo a luchar contra ello con todas mis fuerzas.

En fin.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Como nos afectan los sueños que tenemos a veces acojona un poco. Uno se despierta y pasa gran parte de la mañana afectado aun, y eso que aunque uno es consciente de que noe s mas que un sueño, la sensación sigue ahí.
Que cosas...

Anónimo dijo...

Yo tb

;-)

Vander dijo...

Como decía uno de mis admirados filósofos de mi barrio, -Desde pequeño, no sé si mi vida ha sido real o ha sido un sueño-

Motenai dijo...

Por lo menos uno/a ha pillado el mensaje. Vander, después de los años de criptografía en la armada, esperaba más de tí.