miércoles, 26 de marzo de 2008

El pitufo segurata (que trata sobre algunos trabajos que requieren ciertas condiciones específicas)

Hace días que estoy pensando en esta circunstancia y de hecho se la he comentado a más de una persona. De nuevo, mi fuente de inspiración me llega desde el lugar en el que he pasado más tiempo esta semana santa. Quiero dejar claro que en ningún caso lo escribo con intención de faltarle el respeto a nadie, sino como una reflexión de tipo casual e inocua, sin mala fe.

Estamos de acuerdo que hoy en día la mayor parte de los trabajos los puede cursar indistintamente un hombre o una mujer, o dos personas del mismo sexo de distintas características. Aunque somos muy diferentes, la verdad es que en términos globales (genéticos), la especie humana se parece bastante entre sí.

Sin embargo, hay distintos tipos de labores a las que nos hemos tenido que adaptar, bien para poder ejecutarlas con mayor eficiencia o bien para mejorar la competitividad entre nosotros mismos. Antiguamente, las amazonas se cortaban un pecho para que no impidiera el desarrollo normal del tiro con arco; hoy no llegamos a estos extremos.

Pero lo que sí es cierto es que, por poner algunos ejemplos, las tendencias naturales de la moda de alta costura exigen ciertas cualidades en una mujer: alta, delgada, con porte. Al mismo tiempo, si uno quiere ser piloto de motos o jockey se ve favorecido por tener una estatura y peso reducidos, para mejorar el rendimiento de la máquina. Un pívot, en baloncesto, requiere de cierta altura para ejercer bien su labor y alguien que quiera ser registrador de la propiedad se le exige, entre otras cosas, que tenga memoria. Hasta a los árbitros de fútbol se les exige cierto nivel físico para poder rendir bien en el campo.

Ahora bien, todo el mundo ha estado alguna vez en una discoteca y ha visto los gorilas que generalmente están en la puerta. No se les llama gorilas de forma casual, son personajes inmensos puestos en aquel lugar por una doble razón: disuasoria, la primera, y resolutoria, porque si hay alguien descontrolado en el local se necesita considerable fuerza para reducirlo.

La seguridad privada es un negocio en auge y cada vez más se solicitan los servicios de estas agencias para que, en caso de problemas, se pueda actuar. De hecho, en muchos lugares estos vigilantes ejercen labores propias de la autoridad competente: la policía, la guardia civil, los mossos, etc. Uno puede pensar, siguiendo en la línea del discurso anterior, que si uno de estos vigilantes tiene que protegerme a mí de un eventual peligro, se le exijan ciertas condiciones (mentales pero también físicas) para actuar.

Pues bien, el otro día en el ICO subió con nosotros un segurata de estos. Sinceramente, había algo en la imagen que no cuadraba, que instantáneamente te parece desubicado, como Vander en una película de Woody Allen. Ese vigilante de seguridad no tenía aspecto de vigilante de seguridad: medía menos de 1,55 (era más bajito que mi madre) y debía pesar alrededor de... no sé... cuando los bebés son pequeños no se cuenta su edad por años, sino por meses, no? Pues a este tío le deben contar el peso en gramos. Muy poco, vamos.

Ignoraba completamente que había uniformes XXS, y aún así parecía arrastrar los pantalones. La estampa al llegar a la cintura era de comedia de Cantinflas: era tan aparatoso lo que llevaba en el cinturón (walkie, porra, esposas, etc.) que parecía un disfraz más que un traje... y además al llegar al cuerpo haciendo la silueta... pfff... Me recordó a una flecha que señala hacia abajo, vaya.

El chico es súper-amable, las cosas como son, pero tuve la impresión de que se había equivocado de trabajo. Es decir, no ejerce ni un efecto disuasorio ni parecía tener más que un soplo. Que a lo mejor es un ninja maestro en 15 artes de combate y un asesino profesional, pero me da en la nariz que no. Los ninjas nos olemos entre nosotros.

De pequeño ya recibes signos evidentes de lo que será la estratificación de roles que vivirás en la sociedad cuando seas adulto; en los pitufos, serie que veía de pequeño, eso era más que evidente: el pitufo forzudo, el único que tenía músculos... el presumido, el gafotas, el glotón, el cocinero, el músico... Pues me da la impresión de que alguien no vio esta serie.

Técnicamente, olé por el chico, la verdad. Es decir, igual su ilusión era ser guardia de seguridad a pesar de todo, con lo que kudos para él. Demostraría que puedes ser cualquier cosa que te propongas en la vida. Pero no deja de ser una situación extraña porque soy incapaz de intercambiar mi rol con el de alguien que quiere ser guardia de seguridad en el ICO. Si entonces ha llegado a esa posición porque no le quedaba más remedio, me gustaría tener una conversación con el departamento de recursos humanos de la empresa de seguridad. Seguro que algo positivo íbamos a sacar.

7 comentarios:

Vander dijo...

buah, estás hecho un nazi. Deja a cada uno que sea lo que quiera ¬¬
Como me gustaría que leyese tu blog y la próxima vez que te viese te diese un chorro de patadas en la espinilla ¬¬


Y son, es sin tilde xD

Anónimo dijo...

Yo por los "seguratas" que van pasando por la empresa donde trabajo observo que duran poco, sus jornadas son interminables, casi sin dias de libranza y con muy pocas vacaciones y el sueldo miserable, a veces, me han dado hasta pena. Aqui por 12 horas diarias creo que se llevan 900 euros mensuales.

Otro tema son los vigilantes con arma, son mas cualificados y por lo tanto su trabajo más llevadero.

Sldos. Jordi

Motenai dijo...

Eh, que yo he dicho que lo hacía desde el respeto. Además, no me daría patadas en la espinilla, sino puñetazos xDD

Y deja de mirar la paja en ojo ajeno y no ver la viga en el propio :D

Vander dijo...

Pero qué coño desde el respeto si la entrada se llama "el pitufo segurata"...


Ah, y que lleven pistola no les hace más cualificados, simplemente les hace más peligrosos. Yo sinceramente no pondría mi vida en manos de uno de los seguratas de mi curro.

Motenai dijo...

Pues claro, pero no porque sea pequeño que lo titulo "el pitufo segurata", sino por la estratificación de roles... si es que se te tiene que explicar todo...

Vander dijo...

Anda anda, como si no conociese tu naturaleza cruel. Que a mi no me engañas, no intentes hacerme un truco palabresco de los tuyos.


Y por cierto, acuérdate que ví Match Point, de gudi alen, en el cine.

Listillo.

Motenai dijo...

Porque te pensabas que era una peli de deportes.